Patatas bravas al horno

¿Quién no babea delante de un plato de fantásticas patatas bravas? A ver sí, seguro que conoces a alguien que no le gustan las patatas fritas (sin ir más lejos a mi primo) pero tiene que haber de todo. Si existe gente a la que no le gusta el chocolate (a mi primo también…) qué podemos esperar. Sin comentarios. Volviendo a las patatas bravas, creo que es una de las mejores tapas del mundo. Pero claro, tú cuerpo tampoco te permite meterte entre pecho y espalda esta fritura todos los días. Pero si te digo que puedes hacer unas patatas bravas al horno y que sepan casi tan bien, ¿cómo te quedas? Picante, ahumado, con sabor a hierbas… Maravilla.

En realidad, esta receta de patatas bravas al horno es una versión de las tradicionales porque la bravura está en la salsa, pero aquí no. Ni siquiera llevan salsa. Por supuesto, se la puedes incorporar sin ningún problema pero se trataba de hacer algo rico, fácil y un poco más healthy. Para que las puedas comer cuando quieras. Se pueden servir como tapa o como acompañamiento de un pescado, una carne, unos huevos fritos… Tú eliges.

Te advierto que se convertirán en un imprescindible en tu cocina, lo único que necesitas es un poco de tiempo porque no se hacen en 15 minutos. La preparación es express pero el horno tiene que hacer su magia y la temperatura no puede ser muy elevada porque sino se te queman por fuera y se quedan crudas y duras por dentro. Pero merece mucho la pena y, además, mientras se cocinan te puedes echar una o varias cervezas. ¿Te animas a preparar estas patatas bravas al horno?

Patatas bravas al horno

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Tipo de plato: PicoteoDificultad: Muy fácil

Raciones

2

raciones

Tiempo de preparación

5

minutos

Tiempo de cocinado

50

minutos

Total time

55

minutos

¿Es posible hacer unas patatas bravas al horno? La respuesta es sí. Picante, ahumado, con sabor a hierbas. Fantasía.

ingredientes

• 3 3 patatas medianas

• 4 cucharadas 4 aceite de oliva

• 1 cucharadita 1 pimentón picante

• 1 cucharadita 1 tomillo

• 1/2 cucharadita 1/2 cayena en polvo (guindilla)

• 1/2 cucharadita 1/2 ajo en polvo

• Sal

• Pimienta

receta paso a paso

• Preparamos el aliño. En un bol echamos: el aceite, el tomillo, el pimentón, la cayena, el ajo en polvo, la sal y pimienta negra molida (estos dos últimos al gusto).
• Lavamos las patatas.
• Cortamos en trozos pequeños – medianos (como en dados) de unos 2 – 3 centímetros. No hace falta pelarlas.
• Las colocamos sobre una bandeja de pirex (o cualquiera que sea apta para el horno). Echamos por encima el aliño y, con la ayuda de una cuchara, lo mezclamos muy bien con las patatas.
• Metemos en el horno, precalentado, a 180º – 190º unos 45 – 50 minutos.

trucos

• El tiempo de horneado depende, nunca mejor dicho, del horno. Controla que no se te quemen y sobre todo que la temperatura no esté muy alta porque se quedarán crudas por dentro pero carbonizadas por fuera. Si tu horno tiene ventilador, ponlo.
• Si quieres preparar salsa de acompañamiento te recomiendo que:
  – Pongas una sartén a calentar a fuego medio – alto, posición 7 de 9.
  – Echa un chorro de aceite de oliva.
  – Añade un diente de ajo muy picado. Cuando esté doradito incorpora 100gr. de tomate natural triturado, 1/2 cucharadita de cayena en polvo y una pizca de sal. Déjalo unos 3 – 4 minutos.
  – Sirve por encima de las patatas y a disfrutar.
• Son patatas bravas así que, obviamente, pican. Si no soportas muy bien el picante siéntete libre de cambiar las cantidades a tu gusto. Incluso puedes cambiar el pimentón picante por el dulce. El sabor será muy parecido pero más suave.